El acto lo organiza este sábado la Fundación Pequeño Deseo en la Terminal de Cruceros
La Fundación Pequeño Deseo organiza, con la colaboración de Mediterraneum Events, una MasterClass solidaria que será impartida por María Querol, aspirante MasterChef Junior 3; María Blanco, finalista MasterChef Junior 5 y Mara, aspirante MasterChef Junior 5, el próximo sábado, 26 de mayo, de 11:00 a 14:00 en Alicante Cruise Terminal. Para poder adquirir la entrada hay que hacerlo on line en el siguiente enlace: http://bit.ly/MasterclassFPD
La actividad se realizará el sábado, 26 de mayo, de 11:00 a 14.00h en el espacio Mediterraneum Events en el Muelle de Levante, 14, en la Terminal de Cruceros del Puerto de Alicante. Los medios podrán realizar entrevistas a Mara, María Blanco y María Querol de 10.30h a 11:00h, pudiendo quedarse a grabar la MasterClass a partir de las 11:00 y entrevistar a los responsables de la Fundación Pequeño Deseo.
Esta MasterClass permitirá, a los niños que se apunten, pasar una jornada con tres de las pequeñas grandes cocineras del afamado programa. Al llegar, se les entregará el material y organizarán las mesas para cocinar y después tendrán la oportunidad de preguntarles todo tipo de curiosidades sobre sus experiencias en el programa MasterChef Junior. Posteriormente, cocinarán juntos las tradicionales monas de Pascua y unas galletas, dándoles cada uno la forma que quieran. También podrán elegir la decoración tanto de las monas como de los huevos, cada uno a su gusto. Además, antes de irse a casa con sus monas de Pascua podrán hacerse fotos con ellas y pedirles autografos.
Se trata del primer evento de la Fundación Pequeño Deseo en Alicante, y cuenta con muchas plazas que espera llenar pues los beneficios irán destinados íntegramente a seguir cumpliendo los deseos de los niños enfermos.
La Fundación Pequeño Deseo trabaja desde el año 2000 para hacer realidad los deseos de niños y niñas con enfermedades crónicas o de mal pronóstico con el fin de apoyarles anímicamente y hacer más llevadera su enfermedad. Está demostrado científicamente que el cumplimiento de un deseo genera en el niño emociones positivas que tienen un efecto enorme en su bienestar y mejoría física.